El proyecto trata de diseñar una parada de tranvia, extrapolable a cualquier punto peatonal de una ciudad. El concepto se basa en el origami con apariencia de una pajarita, siendo el objetivo transmitir la sutileza o amabilidad de un objeto fragil en un ambiente hostil.
La parada presenta una estructura mixta de madera y metal. Tiene cuatro apoyos los cuales están fijados al suelo mediante articulaciones que estan conectadas a placas metálicas de unión con la cimentación de hormigón armado.