Baskegur quería promocionar la madera autóctona, por medio de un stand itinerante, apto para la intemperie y resaltar su fácil transporte y montaje.
El espacio se cubre con un entramado del elemento conocido como metro de carpintero plegable, porque recoge la idea tradicional del uso de la madera y la idea representativa de lo que significa un stand. Su despliegue representa su uso, y el pliegue una forma de estar recogido ocupando el mínimo espacio.
Éste resuelve diferentes necesidades de espacio, porque al variar su posición de formas múltiples permite la configuración de espacios polivalentes: desde pantalla para proyecciones, hasta aulas en escuelas, aportando una variedad de soluciones.
La estructura presentada con sus piezas plegables facilitan su transportabilidad, a la vez que el empaquetado, sus uniones, los rebajes, ilustran la flexibilidad y versatilidad de la madera. Se ha utilizado madera de pino radiata de Euskadi y se ha hecho hincapié en su producción de KM0.
