Fumar en pipa nace de la idea de las típicas pipas de nuestros mayores, de ese momento de chimenea y olor que las caracteriza. Se han diseñado tres piezas de cerámica, concretamente loza, que ha sido debidamente moldeada, horneada y esmaltada.
Los esmaltes utilizados son azul mate y verde y negro brillantes. Se ha aplicado con sumo cuidado para no obstruir los orificios que son esenciales para su función además de estar vacías en su interior.
Para conseguir el espacio interior, han sido divididas, vaciadas y unidas mediante barbotina. Las piezas se sujetan con una sola mano, su forma ha sido diseñada conscientemente pensando en la ergonomía.
Dos de ellas tienen forma geométrica y con pequeñas ranuras en los laterales y la pipa negra es de forma orgánica. Son fáciles de agarrar a la hora de fumar. Se coloca el tabaco en la parte superior de la pipa y tras acercar la llama de fuego, del mechero o cerilla, se aspira por la parte inferior.
Se pueden lavar como cualquier pieza de cerámica, con agua y jabón, lo que las mantiene perfectamente limpias en siguientes usos y aumentar así su vida útil. Además del consumo de tabaco, son perfectamente compatibles para el consumo de cannabis medicinal de una forma diferente.
