Es una línea de packaging para polos, tarrinas y cucharas, que evocan la naturaleza como origen, inspiración y materia prima. Se trabaja con la evocación y el entorno, creando la temática de naturaleza helada y recordando el origen.
El diseño junto con el envase simboliza la fuerza de la naturaleza mostrando sus huellas en forma de marcas topográficas de la montaña de San Lorenzo (La Rioja), una de las montañas más bellas de la zona.
Para la elaboración de los polos se han utilizado los puntos cardinales de la misma. En definitiva, es un envase que transmite naturaleza y artesanía a la vez que innovación, diseño y estilo.
Altitud y profundidad se encuentran en este proyecto tan particular creando un universo propio. Dirección de arte: Beatriz Cuenca y Daniel NafríaPackaging Integral: Beatriz Cuenca y Daniel Nafría