Es un proyecto en el que amputo partes de las flores y las sustituyo por metal. Todos tenemos en nuestro interior una parte más débil y otra más fuerte: la sensibilidad y la fortaleza.
La sensibilidad es innata y queda representada por la belleza de las flores. La fortaleza la vamos adquiriendo con la madurez y el paso de los años, con la superación de los vaivenes que nos acarrea la vida.
Es la parte más fría, dura como el metal. Son flores mutiladas que a pesar de todo, conservan todo su esplendor y su belleza.