El proyecto consiste en reformar un taller de bicicletas, en el cual se tenían que almacenar entre 25 y 30 bicicletas además de crear alguna estrategia para atraer a más público.
Lo que se diseñó fue una estructura que hiciese la función de almacenamiento y que además fuese móvil para dejar todo el espacio del taller libre y dar más visibilidad a la tienda desde el exterior.
Esta misma estructura es la que crea el cierre del taller cuando se termina la jornada.