RESUMEN
Cándido Miró es la compañía pionera en industrializar el proceso de rellenado de aceitunas bajo la marca Serpis.
En una categoría mimética en la que se replican movimientos estratégicos Serpis se plantea el trascender los vectores convencionales de decisión y construir un nuevo posicionamiento y plataforma de marca que reactive su actitud de liderazgo.
Con el objetivo de crear una nueva identidad, narrativa y su traslación al packaging profundizamos en las verdades de la marca para encontrar respuesta a qué atributos legítimos pulsar.
Desde la ambición de liderar la categoría buscamos enriquecer todo el universo de marca alrededor del disfrute y de momentos de calidad compartidos.
Un ejercicio de branding que ha llevado, tras una reflexión interna profunda, a redefinir cómo se comporta Serpis en pleno siglo XXI.
Inspirados en ese estilo de vida en el que la emoción y el sabor envuelve todo, redefinimos todo el portfolio de producto con una profunda segmentación y reorganización de mensajes y visuales.
OBJETIVOS
Construir un nuevo posicionamiento de marca en el territorio del disfrute y de los momentos de calidad compartidos.
Conseguir que la marca evolucione sin perder reconocimiento del cliente y que el legado de calidad, pionerismo se sume al de sabor.
Ordenar todo el portfolio de producto con un lay-out singular y apropiable en el lineal y que cada gama refuerce la segmentación de consumo.
PROPUESTA
Conseguimos con el rediseño del Brand-block apropiarnos de todo el heritage de la marca y del imaginario que tiene para construir, gracias al reconocimiento de sus principales assets: color, óvalo y formas, una marca más presente y pregnante para el consumidor. No se busca un salto radical, sí una intervención sutil en la que todos los elementos formales contribuyan a activar el recuerdo de Serpis.
También se trabaja en los elementos que ayudan a la elección del consumidor en el lineal para facilitar su decisión y que la codificación que realice redunde en una mayor percepción de apetitosidad, calidad y sabor.
La dirección fotográfica de las aceitunas que conforman el bodegón central, compuesto por 3 aceitunas, actúa como un potente eye-catcher en cada packaging ha sido cuidada sobremanera para que excite sensorialmente los sentidos y se quieran probar.
Incorporamos un patrón que acompaña a distintas situaciones y contextualizan momentos de consumo de manera que enriquecen la experiencia del consumidor. Trasladamos también a la tapa de las latas ese mismo motivo que recorre todo el perímetro superior y propicia en el lineal que sea más fácilmente encontrado. Una innovación de la categoría que amplía la percepción de la marca en el set competitivo del lineal.
Un lay-out y la jerarquía de la información más clara y con ciertos guiños divertidos y más relajados hacen que la percepción del conjunto, en test con el consumidor, se interprete como apetitosa, divertida, cercana y más sabrosa.
Los descriptores de variedad trabajados con una tipografía handwriting que llena de dinamismo y personalidad el frontpack del producto.
Desde la evolución de la gama core de aceitunas (rellenas anchoa, negras sin hueso, light…) hasta los nuevos lanzamientos (encurtidos, aliadas…) han sido analizadas y afinadas para que todos los ingredientes que componen el universo visual acentúen e incidan en consolidar esa percepción de: vitalidad, disfrute y sabor.
Un proyecto más de orfebrería y de toque sutil de los componentes que la integran para que el conjunto trabaje en la dirección que buscamos: apuntalar como referente a Serpis y asentar su posición de liderazgo.
SOLUCIÓN GRÁFICA
A partir de definir los assets básicos de la marca: color y forma, añadimos tipografías, y una estructura consistente para que estos cambios produzcan grandes resultados.
El salto visual entre la versión anterior y ésta es enorme y sin embargo hay un factor de recuerdo que se activa por justa intervención en cada detalle.
Un trabajo que requiere de ajustes constantes para que la marca no pierda reconocimiento.