Un quesu de cabaña. Se trata de un queso al estilo, sabores y matices de los quesos que se hacían antiguamente en los tiempos de Europa. Tanto el nombre, como la técnica como el queso el sí mismo rinde homenaje a Teresa Campo, madre de Javier Campo, dueño de la quesería. Un diseño que refleja la pasión y amor por Tresviso, por su queso y por nuestras raíces. Un queso como el que hacía Teresa cuando subía en verano a la cabaña La Fuente de la Jazuca: incluso hasta la etiqueta.
Cuando no existían etiquetas se distinguía un queso con un método bastante tradicional: la hoja del árbol autóctono. De esa forma, se evitaban falsificaciones y se sabía de dónde era un queso.
Es en esa misma "etiqueta" en la que hemos inspirado nuestra etiqueta. Una etiqueta con forma de hoja de plágano que se sale del formato tradicional redondo en los quesos y que nos cuenta una historia: la historia de Teresa.
