Para los diseñadores una orla normal es algo muy aburrido, nuestras capacidades de creatividad hay que demostrarlas desde el minuto cero. Por eso, en vez de crear una aburrida y normal, decidí hacer una anti-orla.
Se caracteriza por tener un punto de “locura” y creatividad. Los retratados no tienen que salir en una misma posición, ni mucho menos con una túnica para parecer iguales, sino todo lo contrario.
Incluso pueden “interactuar”, es decir, mirarse, saludarse, tocarse. . . Son estos momentos los que la hacen especial y divertida. Para poder hacer el fotomontaje lo primero era escoger una temática, la elección fue el camuflaje para la que tuve que hacer una foto panorámica de una enredadera, para lo que se hicieron diferentes fotos de la enredadera unida posteriormente en Photomerge.
Se tomaron un día sin mucho sol para que los tonos no difirieran mucho. Después se hicieron las fotografías a las personas, y para ello se hizo con un fondo blanco, un foco de luz blanca y un poco de luz natural procedente de la venta, para eliminar el mayor número de sombras, además de una post-producción en CameraRaw.
Utilizando el trípode para todas las fotografías.