En este proyecto se ha trabajado un diseño de una exposición situada en el edificio de la antigua Sede de Gustavo y Gili, un edificio de estilo racionalista ubicado en el barrio de la Eixample, Barcelona. "Detrás de las escaleras" opta por mostrar al usuario una doble experiencia, disfrutar de una visita del edificio y además, poder conocer todos los rincones de la exposición. Esta cuenta historias de escaleras y le da una importancia más metafórica al que visualmente solo parecen unos simples peldaños. El espacio que se obtiene para la exposición se determina en dos plantas; la planta 0 y la planta 1. En estos ámbitos se desarrollan unas estructuras mediante el relato de cada escala que se expone. En función de cada historia, las piezas escogidas se han distribuido de forma que tenga un sentido en la hora de hacer la visita. El recorrido de la exposición no es cerrado, aun así, tiene un principio y un final. Se trata que el visitante, en cada espacio llegue a experimentar sensaciones a través de las esculturas, audiovisuales y elementos que se acompañan con un relato. Para conseguir una fluidez de emociones se ha pensado adecuadamente el orden de los espacios. Es necesario separar y remarcar en cada espacio la temática, para que el usuario reciba una correcta y ordenada información. La exposición se separa en cuatro espacios; la zona de la escalera de la muerte, la zona de las escaleras del cine, las escaleras del agua y las escaleras caóticas. El relato de esta exposición se basa en las historias que esconden escaleras concretas. Se busca el significado de la creación o la funcionalidad que en el momento daban. Cada una de ellas tienen en común una finalidad y un significado. Encuentran, en cierto modo, la forma de expresar y explicar una historia a partir de unos simples peldaños, tanto es religioso, místico, histórico, en sentido figurado y metafórico. Dentro del cine se encuentran muchas comparaciones con las escaleras, los directores juegan con el mensaje que se interpreta y lo qué se quiere transmitir. Tanto puede ser positivo como negativo. Simbólicamente, una escala puede representar un viaje, puede ser también un conducto que une dos cosas, sea un lugar, ideas o estados de ánimo. Subir las escalas simboliza algo claro, positivo y alentador; sin embargo, bajar las escalas significa algo negativo, confuso y desalentador. Todas las piezas de esta exposición conllevan una estructura de listones de madera de pino con un acabado de paneles efecto cemento de la empresa Cosentino. Contamos también con la empresa Delta light para la iluminación adicional de los elementos y así resaltar puntos importantes, como los diferentes textos e imágenes.
