Este proyecto muestra una colección de tres ilustraciones a dos tintas de los cuentos de "El Libro de la Selva", "Caperucita Roja" y "Pinocho". El principal objetivo era plasmar una escena de la historia, sin que aparecieran los protagonistas de una forma notoria y que, aun así, se reconociera cada relato.
Las ilustraciones, a pesar de ser digitales, muestran un tratamiento manual y artesanal, que les aporta un carácter más amable, acercándolas más al público.