Como amante de la lectura, Sant Jordi se convierte en uno de los días más especiales del año.
Fue la oportunidad de ver Barcelona llena de rosas y libros lo que me inspiró a realizar este proyecto, un trabajo diseñado por el mero disfrute de crear.
Con esta propuesta se pretende reafirmar la belleza de compartir la lectura en un día como este, y, especialmente, de mantener la tradición de acompañar tu nuevo libro con una rosa.
Es así como se crea una propuesta ficticia de cómo realizaría personalmente el diseño que recorre las calles de Barcelona en un día como Sant Jordi, desde la cartelería a los marcapáginas que recibes junto a tu nueva lectura.