Colección “NEO LIFE” (Nupcial)Mi proposición para los nuevos vestidos nupciales que podemos llevar en esta nueva era “Viral Post-confinamiento”, son unas piezas frescas, muy alegres, alejadas de la solemnidad que les caracteriza, llenas de barrocos detalles, a veces ingenuos e infantiles, con piezas recicladas, de aires poco ceremoniosos.
En realidad se trata de aportar un nuevo concepto de vuelta a la vida, después de un terrible momento que ha oscurecido nuestras vidas; concretamente en mi caso, fui una de tantísimas personas que tuvo el virus, con bastante infortunio, que además me lo lleve de España a Reino Unido, donde había acudido por temas laborales, con mis colecciones, y donde me vi atrapada durante varios meses, con una precaria salud, sin posibilidades de trabajar, ya que se me cancelaron todas la presentaciones, la “London Hat week”, “ Ascot”, “Twinwood”, etc…, en un país que no es el mío, con la impotencia de no poder hacer absolutamente nada.
Después de esta experiencia, la vida no te cambia, pero te hace reflexionar y buscar con mayor ansiedad la alegría de vivir cada instante, de hacer aquello que te parecía un sueño y no eras capaz de intentar, y en mi caso, de proporcionar herramientas al resto de la gente, para que vivan de la manera más optimista y libre de prejuicios.
Los vestidos de novia que había hecho anteriormente, eran piezas serias, atemporales y minimalistas, pero sentía la necesidad de proporcionar a todo tipo de mujeres, algo más atrevido, dulce y risueño, en definitiva con vida desbordante.
Los materiales y la confección, COMO SIEMPRE, dentro del “Slow Fashion”, tratando de adaptarlo a todo tipo de novias, con diferentes situaciones, edades, estilos, ritos y lugares de celebración.
En esta nueva etapa, he decido huir del target encasillado para poder adaptarme a aquellas mujeres que se salen de los previstos habituales en las colecciones tradicionales de novia.
Todos los adornos incorporados al tejido son reciclados o vintage, lo cual convierte a cada pieza en un vestido único y exclusivo. Pero al final, la intención es que la persona que lo lleve, solo piense en lo feliz que se siente, y sea capaz de despreocuparse de todo lo que significa esa prenda para mí, de modo que mi filosofía se traduzca únicamente en la alegría de vestirlo, y olvidarse del resto mundo.
