Reinventar una profesión no es fácil y una con tan mala fama más difícil todavía. Así a bote pronto no relacionarías el dentista con el buen rollo, la diversión o la belleza, pero La Fábrica de Sonrisas lo hace y lo consigue sin esfuerzo, porque les sale natural.
Desde que cruzas la puerta te das cuenta de que es una experiencia odontológica diferente. Color, música y diversión, eso es lo que te encontrarás en la Fábrica, un espacio en el que te lo ponen muy fácil para que cuides tu salud dental.
En este proyecto teníamos una base muy buena, que es lo más importante, un proyecto lleno de verdad y alegría que solo hemos tenido que pulir, ordenar y sacar brillo. Vídeo, foto, identidad, una web que nos tiene robado el corazón y un futuro lleno de proyectos divertidos e interesantes, porque de esta fábrica no paran de salir ideas.
Para la marca hemos trabajado con tipografía y lettering en una composición clásica y refrescante. En la gama cromática nos hemos alejado de los colores fríos y hemos elegido colores limpios pero también cercanos.
La papelería y las aplicaciones tienen influencias de la gráfica industrial: albaranes, sellos, perforadoras, papel de calco… pero con un punto divertido tanto en el color como en los mensajes.
En el trabajo fotográfico un reto que nos encanta: fotografía de cacharrería odontológica: que sea bonita e industrial y que no de ni pizquita de mal rollo, sofisticada, limpia, colorida y con un toque vintage.
Hemos tenido la oportunidad de hacer una web divertida, casi un juego. Nada más llegar a la home, los utensilios de odontología se hacen los protagonistas y bailan frente a tí, una dentadura castañea para que puedas pedir cita por whatsapp.
Tiene muchos botones y palancas como en una fábrica antigua, donde cada elemento te lleva a uno nuevo, lleno de color y contenido. Y no podía faltar el Álbum de Sonrisas, en el que podemos ver el resultado de su trabajo y la historia del proyecto, algo ya casi vintage pero que pone de relieve lo importante: sus pacientes.
Es una suerte tener proyectos que crecen y crecen y no te dan más que alegrías. Toda la maquinaria de nuestra Verbena al servicio de esta Fábrica que siempre nos saca una sonrisa.
