El Grupo Saltoki dispone de una marca propia: Stillö con la que ofrecen productos para el baño y cerámica de venta exclusiva en sus establecimientos. Marca posicionada como producto de calidad a precio asequible (medio). Value for money.
Paulatinamente ha ido ganando relevancia entre sus clientes y creen necesario una actualización tanto de posicionamiento como de branding. Al mismo tiempo aflora una necesidad de humanizar la marca, el confinamiento por COVID ha hecho que los hogares se vivan de manera distinta y ahí hay un campo de desarrollo a explorar.
Conseguimos encapsular en una frase en italiano este objetivo de ser cálido, próximo y transportar al usuario al mundo de las emociones.
OBJETIVOS
Crear una Plataforma de Marca a partir de la que construir el edificio de branding para tener un relato alineado con los valores de esta división.
Proponer un claim que de consistencia y coherencia a la marca fácilmente asimilable.
Actualización de la identidad visual en términos de modernidad, impacto y cercanía.
Crear un sistema que unifique y dote de coherencia a las distintas gamas de producto que conforman la marca: mobiliario, grifería, cerámica…
PROPUESTA
Fruto de un mapeo y análisis de la marca actual detectamos que existe una brecha entre lo que Stillö ofrece y la manera en la que se presenta y por tanto lo que sus audiencias perciben.
Debemos incorporar una pátina de diseño que fortalezca su notoriedad como artículo deseable, hacerlo atractivo.
Tras la crisis generada por el coronavirus, hemos visto alteradas nuestras vidas especialmente en lo tocante al hogar, buscamos más personalización, más detalle y calor humano.
Partiendo del reto de conseguir que los espacios Stillo sean más vivibles proponemos dotar de emoción a estas manifestaciones a través de la calidad y la estética.
SOLUCIÓN GRÁFICA
Con una configuración tipográfica en la que toma cuerpo la elección de caracteres geométricos que nos sirven para ordenar y dar más presencia al naming hacemos un juego visual en el que la “T” sintetiza una grifería de diseño.
A partir de aquí el resto de elementos sirven para dotar de consistencia a este nuevo planteamiento. Jerarquizamos las gamas con una paleta cromática en tonos pastel que sirve para evidenciar a cada una de las líneas de producto y ayudar al consumidor a categorizar la oferta.Este uso de tonalidades pastel nos sirve para transmitir calma, cercanía y tranquilidad, evitamos de este modo el ruido y la estridencia que afecta y distorsiona la elección.
Incorporamos un lay-out modular que sirve para crear una pauta visual que facilite la elección al consumidor, además creamos un sello de garantía que unifica y avala la calidad percibida de Stillo.
El claim en italiano amplifica el valor del diseño al apropiarnos de ese imaginario.
PRODUCCIÓN
El sistema visual ayuda a la elección del consumidor, son múltiples los soportes en los que se aplica la nueva imagen, desde la papelería corporativa de los técnicos comerciales hasta el packaging físico con el que se presenta y vende la cerámica, pasando por la propia ambientación del punto de venta.
Un proyecto orgánico con muchas implicaciones cuyo abordaje se prolonga en el tiempo.
Lo importante ha sido crear el universo visual y el sistema que sirva para marcar y codificar cómo se despliega Stillo en todos los elementos que se creen.