En un mundo saturado de impactos publicitarios, nos lanzamos al desafío de captar la atención de un público abrumado por el ruido visual y auditivo. El objetivo era conseguir que las personas de París se volvieran locas por visitar Bizkaia.
Creamos una campaña adaptando el formato y el lenguaje para resonar de manera profunda con nuestra audiencia. El resultado trasciende a lo convencional. Vinculación y reconocimiento de marca en una campaña de marca al estilo SIROPE.
Usamos objetos de nuestra cultura, elevándolos a arte, para que, en la ciudad del amor, y una de las cunas de la moda, pudieran disfrutar de una exposición gratuita, libre y evocadora en más de 180 estaciones de metro durante 3 semanas.
Además, previo a la instalación, trabajamos una campaña digital en redes sociales para generar expectativa, así como durante la campaña física para mejorar el alcance de la misma.
De esta forma, logramos llevar parte de nuestra cultura al centro París, llenándolo de txapelas, kaikus, eguzkilores, xisteras, abarkas… de una manera única y elegante.