Introducción.
Uno de los efectos no deseados del uso de la inteligencia artificial en la publicidad es la exacerbación de los estereotipos. Esto es especialmente nocivo para la autoestima y autopercepción, en particular para las jóvenes generaciones. Para ayudar a resolver este problema se diseño un trucho para Dove, en colaboración con OpenAI, donde se entrena a Dall·E a generar imágenes de belleza que no se basan exclusivamente en los cánones impuestos.
Proyecto.
En un mundo donde la inteligencia artificial generativa de imágenes es omnipresente, la percepción de la belleza está fuertemente influenciada por estándares y estereotipos artificiales. Estos sistemas de IA a menudo aprenden del contenido de internet, produciendo imágenes que se adhieren a los estándares de belleza convencionales, frecuentemente con representaciones sexualizadas. Como resultado, existe una brecha significativa entre la realidad y las expectativas sociales de belleza, afectando particularmente la autoestima de las personas, especialmente de las jóvenes generaciones.
Actualmente, la IA perpetúa una concepción estrecha de la belleza, reforzando estereotipos y exacerbando los sentimientos de subrepresentación en los medios tradicionales. El auge de los influencers, anuncios y modelos generados por IA amplifica este fenómeno, llevando a una mayor presión social para imitar ideales de belleza completamente artificiosos. Esto afecta negativamente la autoestima y la percepción personal, agravando los problemas de autoimagen y confianza.
En respuesta a este desafío, Dove se unió a OpenAI para lanzar #NaturalIntelligence. Esta iniciativa tiene como objetivo ampliar la percepción y representación de la belleza por parte de la inteligencia artificial, aprovechando una base de datos existente de imágenes auténticas de personas, originalmente parte de una campaña previa de Dove, para expandir la manera en que la IA percibe y genera la belleza natural.
