Tras cuatro años de crecimiento continuo y de cara a su nueva estrategia de posicionamiento, en especial en el mercado americano, la empresa ha tomado la decisión de fortalecer su imagen para reflejar la excelencia inherente a sus productos. Con este propósito, desde Ideólogo rediseñamos tanto la identidad corporativa cómo su packaging. El principal elemento del nuevo diseño es una icónica "Q", donde se ha sustituido el apéndice típico de su base por un chile.
La historia de las salsas Quietud está ligada a la tierra donde han sido creadas: Sevilla. El chile, importado por primera vez por Cristóbal Colón, les proporcionó la variedad perfecta, mientras que el vinagre y el vino oloroso, criados en las históricas bodegas de Jerez, añaden un toque de distinción y originalidad. La sal, procedente de la milenaria Bahía de Cádiz, y el toque final de naranja amarga, cosechada en los perfumados jardines del casco viejo de Sevilla, completan su sinfonía de sabores. Con todos estos elementos, hemos centrado el grueso de la identidad de marca en crear un grueso y rico conjunto gráfico que comunica con eficacia los valores de los productos que QUIETUD ofrece.
Además de la identidad visual, hemos seleccionado un nuevo tipo de botella y tapón para mejorar la percepción del conjunto y destacar su diferenciación.